viernes, 11 de octubre de 2013

Receta de tarta de castañas

Receta de tarta de castañas
A pesar de que la castaña contiene muchos hidratos de carbono es uno de los frutos secos que cuenta con menos calorías, de modo que sigue siendo aconsejable en cualquier tipo de dieta. Sus propiedades son muy beneficiosas para la salud y además, son muchas e interesantes las posibilidades que brindan las castañas en la cocina.
Las castañas están deliciosas incluso crudas, pero poca gente puede resistirse a comer un delicioso cucurucho de papel de periódico lleno de castañas calientes y humeantes recién compradas en la calle en una de esas tardes de otoño en que el frío empieza a ser protagonista de la tarde.
Esa es la quizá una de las ideas más bucólica que vienen a la mente cuando se piensa en castañas, reviviendo la niñez y anunciando que ya se acerca la Navidad. Pero hay muchas otras maneras de preparar este fruto seco, todas ellas muy sabrosas. A continuación se detalla la elaboración de una sabrosa tarta de castañas.
Ingredientes (4 personas)
·                   4 huevos
·                   150 gramos de azúcar
·                   100 gramos de harina de trigo
·                   500 gramos de castañas
·                   1 copita de ron
·                   150 gramos de mantequilla
·                   250 gramos de nata líquida para montar
·                   1 sobre de levadura
·                   Azúcar glass para decorar
Preparación
Esta receta de tarta de castaña también puede prepararse con puré de castaña en lugar de con harina de castaña. De las dos formas quedará muy rico, la única diferencia será que con harina de castaña la tarta quedará un poco más compacta y con el puré el resultado será más esponjoso, tipo bizcocho.
En esta ocasión elaboraremos harina de castaña para hacer la tarta. Reservar un puñado de castañas para decorar la tarta.
1.       Hacer un pequeño corte a todas las castañas para evitar que estallen al calentarse, es muy importante este paso ya que de lo contrario habrá una fiesta de palomitas de castaña en el horno.
2.       Meter las castañas al horno y las asarlas hasta que estén tostaditas.
3.       Pelarlas antes de que se enfríen y las dejarlas totalmente sin cáscara.
4.       Triturar las castañas a velocidad rápida en la picadora
5.       Pasar las castañas por el colador tamizándolas de forma que va quedando una harina fina.
6.       Engrasar y espolvorear con harina un molde para bizcocho de forma circular.
7.       Montamos la nata.
8.       Echar en un bol la harina de castañas, el azúcar y la nata montada.
9.       Batir hasta lograr una crema suave.
10.    Tamizar la harina de trigo y la levadura en polvo.
11.    Añadir uno a uno los huevos y remover toda la mezcla con cuidado.
12.    Añadir a la mezcla anterior la mantequilla derretida y el ron.
13.    Precalentar el horno a 190 º y hornear 30 minutos, dependiendo del horno, así que habrá que ir mirando que la tarta esté en su punto y no se queme. Para comprobarlo introducir un palillo de madera y si sale limpio es que estará lista.
Sugerencias de presentación
Como decoración se pueden utilizar las mismas castañas cortadas y peladas en trocitos colocándolas en el borde de la tarta. Como toque final se espolvorearía la tarta con azúcar glass.
Otra sugerencia de presentación sería adornar la tarta una vez orneada con frambuesas frescas o moras, unas frutas muy otoñales también. Decorándola con un toque de nata montada quedará perfecta y muy apetecible.
Otra variación sería cortar la tarta por la mitad y poner chocolate fundido en el centro, volver a unir los dos discos de tarta y decorar los bordes de la misma con el mismo chocolate de repostería fundido. Después se podría decorar con unos fideos de chocolate o con azúcar glass.
Esta tarta de castañas será el acompañamiento perfecto para una de esas tardes grises de otoño en la que sienta tan bien una taza de buen café y algo dulce. El exquisito sabor de las castañas no tardará en impregnar los paladares de cualquiera que tenga la suerte de probarla. Si además de endulzar el paladar con una buena tarta se quiere combatir el frío, será cuestión de servir una copita de un licor dulce, como un Grand Marnier, un plan verdaderamente tentador.


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