Mis tardes blancas
Mis tardes blancas, que no se olvidan,
las recordaré porque estabas conmigo,
y descubriré el color de la soledad
cuando tiñas de negro mi espacio,
cuando no baste el color de tu recuerdo,
porque el vacío que dejas se borra con el tiempo.
Me sentaré a mirar el color de la tarde,
y contemplaré los días y las noches,
viendo pasar el azul de mi pasado.
No te vayas nunca, que a mi lado,
todo será blanco y luminoso
y nos sentaremos juntos a ver pasar las tardes…
Mis tardes blancas que tanto añoro,
viendo caer la llúvia en los tejados
y esperando que el tiempo cure todo.
Pero el tiempo ha pasado y no me cura
este inmenso agujero de mi alma
que atraviesa mi calma y me desquicia
y me quema, y me llena de amargura.
Mis tardes ya no son blancas, son oscuras,
más aún tengo esperanza de colores
y tengo fe brillante que me arrulla.
